11 de Septiembre...sin duda una tragedia para muchas personas. Pero en casa, este día, supone uno de los más felices de nuestras vidas...Nació Zaira, mi sobrina, brindándonos a todos/as la alegría, el desparpajo y la ilusión por las cosas pequeñas. Ésas en las que antes no nos parábamos a pensar y a las que los niños/as tantas horas les dedican...y el clásico: ¿y por qué?
Y parece que no pasa el tiempo...pero ayer cumplió ya cinco años. Cinco años desde que mis lágrimas llenaron todo mi rostro, al ver su carita sonriente y tan bonita. Cinco años llenos de amor, cariño, dulzura y simpatía. De "te quiero" y llenos de luz. También cabe decir, cinco años de lloros, de peticiones, de "no te vayas sin mí", de "mi tía sin mi no va a ningún sitio"(jejejee)...
Para mí, vivir con mi sobrina supone tener siempre una carita alegre esperando, un regalito en mente que comprar, una respuesta sorpresa o una pregunta indiscreta. Pero al ver sus ojos llenos de ilusión, todas las cosas que hago por ella se convierten en un deseo.
Nunca creí que tenerla entre mis brazos iba a ser una sensación tan única. Su encanto natural me hace sentir débil y a la vez tan fuerte. Porque siempre encuentra una manera de tocarnos la fibra sensible, pero a la vez nos hace sentirnos fuerte por su amor y por su protección.
Tu gracia altera el aire,tu amor ...lo puede todo. TE QUIERO, ZAIRA!!!
FELIZ CUMPLEAÑOS...y que cumplas muchos más...y yo pueda besarte y abrazarte en todos ellos!!
Por un 11 de septiembre muy distinto!
